
La simplicidad de unos huevos fritos de gallinas de corral, recién hechos , cuyo acompañamiento puede ser tan sofisticado como se desee. Desde patatas fritas y chistorra de Navarra hasta trufas, angulas, caviar pasando por cualquier otro producto de temporada que se pueda imaginar. Siempre utilizando aceite de oliva virgen de la mayor calidad.
El plato de toda la vida con el mejor sabor imaginable.
